Epic Games y Apple están enfrascados en una larga batalla legal sobre las políticas de la App Store de Apple y las comisiones en las compras dentro de la aplicación. Tras una reciente sentencia judicial que determinó que Apple violó las leyes antimonopolio en cuanto a precios, Epic está ahora presionando para que se dicte una orden judicial que obligue a Apple a reinstalar Fortnite en la App Store de EE. UU., pero Apple se resiste, lo que ha provocado que Fortnite esté fuera de línea a nivel mundial.
Epic Games está intensificando su presión sobre Apple para reinstaurar Fortnite en la App Store, una medida que surge de una prolongada batalla legal sobre las políticas de la App Store de Apple.
Para empezar, Epic Games ha presentado un nuevo documento judicial solicitando a la jueza Yvonne Gonzalez Rogers que ordene a Apple permitir que una versión compatible de Fortnite regrese a la App Store de EE. UU. Esta presentación subraya los persistentes esfuerzos de Epic para recuperar el acceso a la plataforma, que perdió debido a la disputa en curso.
Además, el núcleo del conflicto reside en las políticas de la App Store de Apple, específicamente las comisiones que cobra por las compras dentro de la aplicación. Este aspecto financiero ha sido un importante punto de controversia, impulsando los procedimientos legales entre las dos empresas.
Asimismo, Epic obtuvo una victoria legal significativa el mes pasado cuando la jueza Gonzalez Rogers dictaminó que Apple había incurrido en una “violación intencionada” de una orden judicial relacionada con precios anticompetitivos. Este fallo, en esencia, abrió la posibilidad del regreso de Fortnite a la App Store y, de manera más amplia, que los desarrolladores ofrecieran métodos de pago alternativos dentro de sus aplicaciones.
Sin embargo, Apple ha impugnado este fallo y anunció su intención de apelar. Esta apelación complica la situación, retrasando cualquier resolución inmediata y escalando aún más la batalla legal.
En una contramedida, Epic declaró que Apple está bloqueando Fortnite de su App Store de EE. UU. e impidiendo su lanzamiento en la tienda de Epic Games en Europa. Epic declaró: “Ahora, lamentablemente, Fortnite en iOS estará fuera de línea en todo el mundo hasta que Apple lo desbloquee”.
En respuesta, Apple disputó la caracterización de la situación por parte de Epic, particularmente la afirmación de un bloqueo global. Apple aclaró que solicitó a Epic Suecia que volviera a enviar la actualización de la aplicación sin incluir la App Store de EE. UU., para no afectar a Fortnite en otras regiones.
Profundizando en la situación, la pregunta principal es por qué Fortnite está bloqueado en los Estados Unidos. La respuesta proviene de una carta firmada por Mark A. Perry, un abogado que representa a Apple, que fue enviada a los abogados de Epic.
La carta establece que Apple ha decidido no tomar medidas sobre la presentación de la aplicación Fortnite hasta que el Noveno Circuito se pronuncie sobre su solicitud pendiente de una suspensión parcial de la nueva orden judicial. Esto indica que Apple está esperando la decisión de un tribunal superior antes de permitir que Fortnite regrese a la App Store de EE. UU.
En consecuencia, Epic argumenta en su presentación que Apple le está negando la capacidad de capitalizar las reglas procompetitivas que Epic ayudó a establecer. Esta negación, según Epic, es una forma de castigo.
Además, Epic sostiene que Apple la está “castigando” efectivamente al excluirla del mismo mercado que luchó tanto por abrir. Esta acción, afirma Epic, envía un mensaje claro a otros desarrolladores, desalentándolos de desafiar las prácticas de Apple.
Epic Games busca una orden judicial para que Apple reincorpore Fortnite en la App Store de EE. UU., tras una reciente sentencia contra las prácticas anticompetitivas de Apple. A pesar de esta victoria, Apple retrasa la acción a la espera de una apelación y ha retirado temporalmente Fortnite globalmente, alegando que la actualización de Epic impacta otras regiones. Epic argumenta que Apple está tomando represalias y disuadiendo a otros desarrolladores de desafiar sus políticas, destacando una batalla continua por el control de la App Store y las opciones de pago para desarrolladores.