Duolingo, el gigante del aprendizaje de idiomas, está adoptando una directriz “primero la IA”, requiriendo que los equipos demuestren que los nuevos empleados no son reemplazables por inteligencia artificial. Este cambio refleja una tendencia más amplia entre las empresas tecnológicas que priorizan la IA y la automatización, lo que lleva a cambios en las prácticas de contratación e incluso a recortes de empleos, ya que las empresas buscan optimizar las operaciones y escalar la creación de contenido.
Duolingo, la plataforma de aprendizaje de idiomas, está adoptando un mandato “AI-primero”, alterando significativamente su enfoque de contratación y operaciones. Este cambio, anunciado por el cofundador y CEO Luis von Ahn, prioriza el uso de inteligencia artificial para automatizar tareas y optimizar procesos. Específicamente, la compañía solo aprobará nuevas contrataciones si pueden demostrar que el trabajo no puede ser manejado por la IA. Además, Duolingo planea eliminar gradualmente a los contratistas que realizan tareas que la IA puede gestionar, y tiene la intención de integrar la IA en la contratación y las evaluaciones de desempeño. Esta estrategia refleja una tendencia más amplia en la industria tecnológica, con empresas como Duolingo reconociendo el potencial transformador de la IA y su capacidad para remodelar el lugar de trabajo.
La justificación detrás del enfoque “AI-primero” de Duolingo se centra en la necesidad de una rápida creación de contenido y escalabilidad. Como explicó von Ahn en su correo electrónico, la compañía tiene como objetivo producir una gran cantidad de contenido para enseñar eficazmente a sus usuarios. Hizo hincapié en que la creación manual de contenido no es escalable y que la IA es crucial para lograr este objetivo. De hecho, Duolingo ya ha experimentado los beneficios de la IA, citando la sustitución de un proceso de creación de contenido lento y manual por uno impulsado por la IA. Este cambio, según von Ahn, es esencial para proporcionar a los estudiantes el contenido que necesitan lo más rápido posible. Cree que esperar a que la IA sea perfecta sería perjudicial, y la compañía está priorizando la velocidad y la innovación sobre la perfección.
La medida de Duolingo no es un incidente aislado; refleja estrategias similares adoptadas por otros gigantes tecnológicos. Shopify, por ejemplo, ha implementado una política que exige a los equipos justificar su necesidad de personal o recursos demostrando que no pueden lograr sus objetivos utilizando la IA. El CEO de Shopify, Tobi Lutke, ha enmarcado el uso de la IA como una expectativa básica para los empleados, animándolos a considerar cómo los agentes de IA autónomos podrían integrarse en sus equipos. Este enfoque proactivo de la adopción de la IA destaca el creciente énfasis en la automatización y la eficiencia dentro del sector tecnológico.
Sin embargo, el cambio hacia la IA también tiene implicaciones para la dinámica de la fuerza laboral. Canva, otra empresa tecnológica, despidió a la mayor parte de su equipo de redacción técnica a principios de este año, aunque se entiende que esto no fue una consecuencia directa del uso de la IA. Este ejemplo subraya el potencial de la IA para impactar la seguridad laboral, ya que las empresas buscan cada vez más automatizar tareas que antes realizaban los trabajadores humanos.
El impacto de la IA se extiende más allá del sector privado, con el servicio público también explorando su potencial. El Servicio Público Australiano ha experimentado con herramientas de IA generativa, como Copilot de Microsoft, pero ha encontrado desafíos en la adopción, incluidas las preocupaciones de los empleados sobre la seguridad laboral y el impacto ambiental. Además, la Oficina Nacional de Auditoría de Australia descubrió que numerosas entidades gubernamentales ya estaban utilizando la IA sin políticas establecidas que regularan su uso. Estas agencias están utilizando la IA para diversos fines, incluyendo la investigación y el desarrollo, la administración de sistemas de TI y los datos y la presentación de informes.
Las implicaciones más amplias de la adopción de la IA son significativas, particularmente para la fuerza laboral australiana. Según el Grupo de Política Social, si la tasa actual de adopción de la IA continúa, un tercio de toda la fuerza laboral podría enfrentar períodos de desempleo para 2030. Esta estadística subraya la necesidad de que los trabajadores adopten el aprendizaje continuo y se adapten a las cambiantes demandas del mercado laboral. El auge de la IA no es solo un cambio tecnológico; es una transformación social que requiere medidas proactivas para mitigar las posibles consecuencias negativas y asegurar una transición fluida para la fuerza laboral.
Duolingo, al igual que Shopify y Canva, prioriza la integración de la IA, exigiendo a los equipos demostrar que las tareas no pueden automatizarse antes de contratar y eliminando incluso a contratistas. Este cambio, impulsado por la necesidad de escalar la creación de contenido y eliminar tareas repetitivas, refleja una tendencia más amplia en la tecnología, que podría afectar a un tercio de la fuerza laboral australiana para 2030. También surgen preocupaciones sobre el impacto de la IA en los empleos y la gobernanza en el sector público, lo que subraya la necesidad urgente de una adaptación proactiva de la fuerza laboral y una implementación responsable de la IA.